La gastroscopia es un procedimiento médico que permite examinar el interior del tracto digestivo superior. Se utiliza para diagnosticar y tratar diversas afecciones relacionadas con el esófago, el estómago y el duodeno. Durante este proceso, se emplea un endoscopio, un tubo flexible con una cámara en su extremo. La gastroscopia es fundamental para la detección de enfermedades y la realización de tratamientos específicos.

 

Gastroscopia: qué es

La gastroscopia es un procedimiento médico de gran importancia que permite examinar el aparato digestivo superior de manera eficaz.

Visualización del tracto digestivo superior

Este procedimiento se centra en la evaluación del esófago, estómago y duodeno, ofreciendo una visión directa del interior de estas estructuras. Es fundamental para identificar cualquier anomalía que pueda estar afectando el sistema digestivo. Para ello, se utilizan técnicas que permiten obtener imágenes nítidas y de alta calidad durante la exploración.

Utilización del endoscopio

El endoscopio es el instrumento clave en la gastroscopia. Este dispositivo flexible, que posee una cámara en su extremo, permite a los especialistas observar detalladamente las paredes internas del tracto digestivo. A continuación se enumeran algunas características relevantes del endoscopio:

  • Flexibilidad: Su diseño permite que el endoscopio se curve y adapte a las diferentes secciones del tracto digestivo.
  • Cámara de alta definición: Esta cámara transmite imágenes en tiempo real, lo que ayuda en la identificación de lesiones o anomalías.
  • Canal de trabajo: El endoscopio está equipado con un canal que permite la introducción de instrumentos para la recogida de muestras y la realización de tratamientos mientras se observa el interior.

El manejo del endoscopio es realizado por médicos especialistas con experiencia en gastroenterología, quienes cuentan con la formación adecuada para interpretar los hallazgos que se obtienen durante el procedimiento. El desarrollo de la gastroscopia ha permitido mejorar significativamente el diagnóstico y tratamiento de diversas condiciones gastrointestinales, siendo una herramienta invaluable en la medicina moderna.

 

Para qué sirve la gastroscopia

Los principales objetivos de la gastroscopia son:

  • Diagnosticar alteraciones en la mucosa digestiva, como inflamaciones, úlceras o tumores.
  • Tomar biopsias para análisis histopatológicos.
  • Realizar tratamientos como la eliminación de pólipos o la coagulación de hemorragias.

 

Funciones de la gastroscopia

La gastroscopia cumple funciones esenciales tanto en el diagnóstico como en el tratamiento de diversas afecciones del tracto digestivo superior. Este procedimiento no solo permite detectar problemas, sino que también facilita la intervención en trastornos específicos.

Diagnóstico de enfermedades

Una de las funciones más destacadas de la gastroscopia es su capacidad para diagnosticar múltiples enfermedades del aparato digestivo. A través de esta técnica, los médicos pueden observar anomalías en tiempo real y obtener biopsias si es necesario. Existen diversos trastornos que pueden ser identificados mediante este procedimiento, tales como:

  • Enfermedades inflamatorias como la gastritis, donde se observa la inflamación de la mucosa gástrica.
  • Úlceras gástricas y duodenales, que son heridas que pueden causar dolor y malestar significativo.
  • Alteraciones relacionadas con el reflujo gastroesofágico, que afectan la calidad de vida del paciente.

Aplicaciones terapéuticas

La gastroscopia también tiene aplicaciones terapéuticas, lo que la convierte en una herramienta polivalente en la práctica médica. Esto incluye, pero no se limita a:

  • Dilatación de zonas estenóticas, donde se estrechan los conductos del sistema digestivo, facilitando el paso de los alimentos.
  • Extirpación de pólipos, que son crecimientos anormales en la mucosa gástrica que pueden presentar potencial de malignidad.
  • Control de hemorragias digestivas, proporcionando intervenciones directas para detener el sangrado en caso de lesiones.

Por tanto, la gastroscopia no solo se limita a la obtención de información diagnóstica, sino que también ofrece soluciones inmediatas para problemas identificados durante el procedimiento.

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 En el ámbito privado, el precio de una gastroscopia puede oscilar entre 200 € y 600 €, dependiendo de factores como la clínica, la ciudad y los servicios incluidos, como la sedación o la biopsia.

En TuHospital, la prueba de gastroscopia cuesta 475€, garantizando atención especializada, tecnología avanzada y un diagnóstico preciso. Este precio incluye:

  • Consulta previa con un especialista.
  • Realización de la prueba con sedación.
  • Informe médico detallado con resultados.

 

¿Cuánto dura la gastroscopia? 

El procedimiento de la gastroscopia se realiza de manera meticulosa por lo que el paciente se tumba en la camilla para asegurar la seguridad y comodidad del paciente. Se le aplica la anestesia, y dura unos 20 minutos, pero el tiempo de exploración es de unos 10-15 minutos.

 

¿Cuándo y para qué es necesario hacerse una gastroscopia?

Son múltiples los motivos por los cuales se recomienda hacer una endoscopia digestiva alta o gastroscopia, algunos de ellos son los siguientes:

  • Buscar el origen de vómitos de sangre.
  • Estudio de posibles problemas del estómago, como úlceras gástricas, tumores o gastritis. 
  • Estudio de posibles problemas del duodeno.
  • Diagnosticar enfermedades como la hernia de hiato o el reflujo.
  • Buscar el origen de ciertas anemias, en caso de que haya pérdidas constantes de sangre.
  • Para estudiar problemas del esófago, como la esofagitis, un estrechamiento o la aparición de tumores. 
  • Búsqueda de causas de dolor abdominal, dificultad para tragar, vómitos, entre otros.
  • Control de pacientes con cirrosis hepática.
  • Toma de muestras de biopsias, para estudiar posibles enfermedades como la infección por helicobacter pylori, la celiaquía o tumor.

Es la única prueba que nos permite el diagnóstico y el análisis de tumores que de otra forma no son accesibles ni visibles.

 

¿Qué preparación hace falta para una gastroscopia? 

Lo importante para la realización de una endoscopia digestiva alta o gastroscopia es que el tracto digestivo superior esté vacío antes de la realización de la prueba. El especialista en aparato digestivo le indicara la preparación necesaria, pero lo normal es estar en ayunas (no comer ni beber) 6 – 8 horas antes de la gastroscopia. Tampoco se puede fumar durante ese periodo.

Es imprescindible informar al doctor sobre patologías médicas que padezca el paciente así como de los medicamentos que toma. En caso de tomar medicamentos que afecten a la coagulación sanguínea, es posible que se le pida al paciente que deje de tomarlas unos días antes de la prueba. 

Ninguna otra preparación adicional es necesaria para hacerse una gastroscopia. Lo que sí es recomendable es acudir acompañado dado que se administra un sedante durante la prueba y no permite conducir durante las siguientes horas.

Hay que tener consideraciones especiales pacientes con antecedentes de alergias a ciertos medicamentos, que deben ser informadas a los médicos, o los que estén  tomando anticoagulantes. 

Resultados de la endoscopia digestiva alta 

El especialista realizará un informe final, que se completará con posterioridad con los resultados de la anatomía patológica, en caso de que se haya extraído algún pólipo o realizando una biopsia. El informe incluirá las conclusiones y podrá ir acompañado de algunas imágenes de los hallazgos. 

Los resultados de una gastroscopia son variados, estos pueden incluir:

  • Anomalías en la mucosa: Inflamaciones, úlceras o lesiones que requieren mayor investigación.
  • Presencia de pólipos: Estos pueden ser benignos o malignos y, en caso de ser necesarios, se procederá a su extirpación.
  • Indicaciones de enfermedades crónicas: Diagnósticos relacionados con gastritis, reflujo gastroesofágico o incluso cáncer.

La consulta con el especialista unas semanas después es imprescindible para completar el informe y comprender todo lo que pone en el informe y definir, en caso de que sea necesario, el tratamiento a seguir. 

Hospitales donde realizarse la prueba

cuanto dura la gastroscopia

¿Qué efectos secundarios o que se siente después de una gastroscopia?

Tras la gastroscopia lo normal es sentirse atontado y somnoliento algunas horas y por norma general no se recuerda parte de lo sucedido. También es norma y habitual sentir distensión abdominal y gases que el cuerpo irá expulsando. También son habituales las molestias en la garganta durante los días posteriores. Si ha habido extracción de pólipos puede haber algo de sangre en las heces, que tendrán una coloración oscura. 

 

¿Cuál es el periodo de recuperación?

Una vez finalizado el procedimiento, el paciente se traslada a un área de recuperación, donde será monitoreado hasta que los efectos de la sedación desaparezcan. Este proceso de recuperación puede tomar entre 20 y 40 minutos. Durante este intervalo, el personal médico supervisa las constantes vitales, asegurándose de que el paciente esté estable. Al recuperar la conciencia, se le pueden ofrecer pequeñas cantidades de líquidos o alimentos blandos, según su grado de alerta y comodidad.

 

¿Qué riesgos tiene la gastroscopia?

La gastroscopia es una prueba muy segura y el riesgo de complicaciones es muy bajo, inferior al uno por mil, pero siempre existe la posibilidad de que se produzcan complicaciones como una mínima hemorragia al tomar una biopsia o una pequeña perforación. 

Por otra parte el paciente puede tener una reacción inesperada a los medicamentos utilizados, por lo que es imprescindible comunicar con anterioridad al doctor todo tipo de alergias o patologías.

Si con posterioridad a la prueba sufre mareos intensos, fiebre, dificultad para respirar u otros síntomas debe contactar inmediatamente con su médico. También hay que contactar si hay vómitos con sangre. 

Para reducir los riesgos asociados a la gastroscopia, se recomienda informar al médico sobre cualquier condición de salud previa y medicamentos que se estén tomando. Seguir las instrucciones de preparación antes del procedimiento y optar por realizar el examen en una instalación acreditada con personal experimentado.

 

Posibles riesgos y complicaciones

La gastroscopia, aunque generalmente es un procedimiento seguro, tiene ciertos riesgos y complicaciones. Estos pueden variar según la condición del paciente y la técnica utilizada. Es importante estar informado sobre estas posibilidades para tomar decisiones adecuadas y estar preparado antes de realizar el procedimiento.

 

Complicaciones comunes

Las complicaciones más frecuentes asociadas a la gastroscopia son relativamente raras, pero pueden incluir:

  • Sangrado
    El sangrado puede ocurrir especialmente si se realiza una biopsia o si se tratan lesiones. Usualmente, este tipo de sangrado es ligero y se resuelve durante el procedimiento. Sin embargo, si se presenta un sangrado más significativo, puede requerir atención médica adicional.
  • Perforación
    La perforación se refiere a un agujero en las paredes del esófago, estómago o duodeno. Esta complicación es extremadamente inusual pero tiene consecuencias graves. Si ocurre, suele requerir una intervención quirúrgica inmediata para reparar la lesión.

 

Reacciones al anestésico

Los pacientes pueden experimentar reacciones adversas relacionadas con la sedación o la anestesia local. Estas reacciones pueden ser leves o graves e incluyen:

  • Reacciones alérgicas, que van desde erupciones cutáneas hasta anafilaxis.
  • Complicaciones respiratorias, especialmente en individuos con condiciones preexistentes.

 

Cómo minimizar los riesgos

Para reducir al máximo las posibilidades de complicaciones durante y después de una gastroscopia, se pueden seguir algunas recomendaciones:

  • Informar al médico sobre cualquier condición médica existente, así como sobre medicamentos que se estén tomando, en especial anticoagulantes.
  • Seguir las instrucciones de ayuno antes del procedimiento, asegurando un estómago limpio.
  • Asistir con un acompañante, dado que la sedación puede afectar temporalmente la capacidad para realizar actividades físicas o conducir.
  • Realizar un seguimiento post-procedimiento para detectar cualquier síntoma inusual, como dolor severo o sangrado.

 

Interpretación de los resultados

La interpretación de los resultados de una gastroscopia es fundamental para establecer un diagnóstico preciso y planificar el tratamiento adecuado. A continuación se detallan los aspectos más relevantes en la valoración de los hallazgos obtenidos durante el procedimiento.

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Dudas y aclaraciones comunes sobre la gastroscopia

¿Es dolorosa la gastroscopia?

La mayoría de los pacientes experimenta molestias mínimas durante la gastroscopia gracias a la sedación. Sin embargo, es posible que haya una sensación de presión o malestar temporal.

¿Cuál es el tiempo de recuperación?

El tiempo de recuperación varía según cada paciente, pero generalmente se recomienda permanecer en observación durante 20 a 40 minutos tras la prueba. Es importante evitar conducir o realizar actividades que requieran concentración durante el día de la exploración.

¿Qué puedo comer después de la gastroscopia?

Tras el procedimiento, se pueden reanudar las ingestas de alimentos en pequeñas cantidades, salvo que se hayan realizado biopsias extensivas, en cuyo caso el médico aconsejará un tipo de dieta específica.

¿Cómo se hace la prueba de la gastroscopia?

La gastroscopia se realiza introduciendo un tubo flexible con una cámara (endoscopio) a través de la boca, permitiendo al médico inspeccionar el esófago, el estómago y el duodeno. Durante el procedimiento, se pueden tomar muestras para biopsias o tratar lesiones si es necesario.

¿Qué enfermedades detecta la gastroscopia?

La gastroscopia es útil para diagnosticar diversas afecciones, entre ellas:

  • Úlceras gástricas y duodenales.
  • Gastritis o inflamación del estómago.
  • Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE).
  • Cáncer gástrico o de esófago en etapas iniciales.
  • Presencia de Helicobacter pylori, una bacteria asociada a úlceras y gastritis.

¿Cómo te duermen para una gastroscopia?

Durante la gastroscopia, generalmente se utiliza sedación consciente. Este tipo de sedación relaja al paciente y elimina cualquier molestia o ansiedad, pero permite que permanezca lo suficientemente alerta para colaborar si es necesario. También puede administrarse anestesia local en la garganta para minimizar las náuseas.

¿Cuánto tiempo se tarda en hacer una gastroscopia?

El procedimiento suele durar entre 10 y 20 minutos. Sin embargo, debes considerar algo más de tiempo para la preparación previa y la recuperación después de la sedación.

¿Cuánto cuesta una gastroscopia por privado?

El precio de una gastroscopia privada puede variar según la clínica y los servicios adicionales, como biopsias. Generalmente, oscila entre 200 € y 600 €. En Tu Hospital, el precio en Madrid de la gastroscopia es de 475€, en caso de realizarla junto con la colonoscopia el precio es de 715€, incluyendo la consulta previa y el informe médico detallado.

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Importante: Esta información tiene únicamente un carácter informativo y en ningún caso médico. Es importante que consulte a su médico sobre su enfermedad específica y el tratamiento más adecuado.

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