Cirugía Ortognática
¿En qué consiste la Cirugía Ortognática?
La cirugía maxilofacial tiene como objetivo llevar los dientes a una posición adecuada respecto a sus bases óseas. Se inicia con un tratamiento de ortodoncia que dura un año.
Hay que explicar la diferencia entre la ortodoncia y la cirugía ortognática. La primera actúa sobre los dientes y trata de alinearlos, mientras que la segunda actúa sobre los huesos.
La intención de esta cirugía es mejorar la armonía de un rostro con proporciones inadecuadas debido al crecimiento anormal de alguno de sus huesos y la mordida (oclusión) de la boca. La mandíbula y el maxilar superior se han desarrollado de manera incorrecta, y a su vez los dientes se han ido adaptando a ellos, con lo cual no están bien alineados.
Antes de la operación, se hace un estudio facial minucioso, llevado a cabo por el ortodoncista. Se basará en un estudio radiológico así como en los modelos de los dientes del paciente y las fotografías. Su cometido es hacer las mediciones oportunas, con todo este material, que presentará al cirujano maxilofacial el día de la cirugía. De esta modo, se conseguirá que el paciente logre una mejora de salud, funcional y estética.
La operación tiene una duración de 4 horas aproximadamente. Se realiza bajo anestesia general.
En ella, el cirujano actúa sobre la mandíbula o el maxilar, realizando movimientos en los huesos y unos cortes mediante incisiones intraorales para que no se aprecie ninguna cicatriz. Mediante miniplacas y tornillos de titanio, fijará dichos huesos una vez que los haya en una posición y un tamaño armónico.
¿Qué tipos de cirugía ortognática existen?
- Asimetrías: se realiza si el paciente presenta diferencias notables entre el lado derecho e izquierdo de la cara.
- Mordida abierta: se practica cuando los dientes frontales superiores e inferiores no contactan.
- Clase II o retrognatia: se practica si el paciente tiene la mandíbula atrasada respecto al maxilar superior.
- Clase III o prognatismo: se lleva a cabo cuando la persona tiene la mandíbula hacia adelante.
Existe otra, llamada cirugía bimaxilar, del maxilar superior y de la mandíbula que se realizará cuando:
- La mandíbula es grande y el maxilar es pequeño.
- Existe demasiada discrepancia entre ambos maxilares y no puede operarse únicamente el maxilar con el problema.
Normalmente se realiza el tratamiento de cirugía y se termina con ortodoncia. En la mayoría de los casos este tipo de intervención es acompañada de una mentoplastia.
¿Cómo es el Postoperatorio de la cirugía maxilofacial?
La recuperación completa del paciente dura aproximadamente un mes. La baja laboral se extiende por un periodo máximo de tres semanas, también dependiendo del tipo de trabajo que desarrolle. Conlleva cierto riesgo si es una profesión muy activa y requiere hablar mucho, en ese caso, se necesitará un tiempo de recuperación mayor.
Las dos primeras semanas son las más complicadas dentro de esta etapa postoperatoria. Aún así los pacientes aseguran que no notan dolor, es algo que a los profesionales les sorprende especialmente.
Sin embargo, sí que se nota una hinchazón facial y se encuentran algunos inconvenientes en la rutina diaria como los siguientes:
- Dificultades al respirar, por lo que no hay que tumbarse completamente.
- No hablar con normalidad.
- Solamente se ingieren alimentos fríos mediante pajitas y jeringas.
- Necesitan llevar puestos unos elásticos durante todo el día. Tendrán dificultad para respirar y hablar con normalidad. Pero después de este periodo se sentirán más cómodos porque habrá una importante mejoría.
Es decir, los primeros días son duros para el paciente. Sin embargo, una vez pasado este periodo, la cirugía ortognática merece la pena si se tiene en cuenta la notable mejora que experimentan durante el resto de su vida.
A las dos semanas, los pacientes pueden empezar a ingerir dieta blanda y solamente necesitan usar los elásticos unas horas al día.
Al superar el postoperatorio viene la fase de ortodoncia y seguimiento por dos años. Es fundamental evitar que la boca vuelva al estado original y lograr la estabilidad de la oclusión. Para que todo sea un éxito depende de los hábitos del paciente, factores hereditarios y una adecuada aplicación del protocolo. Igualmente influye la colaboración entre los dos especialistas citados anteriormente.
Probablemente algunos pacientes tienen que ir a terapia con un fonoaudiólogo porque la pronunciación puede cambiar también al modificar la posición de la mandíbula.
¿Qué riesgos o complicaciones tiene la Cirugía Ortognática?
Siempre existe un riesgo de desarrollar complicaciones durante y después de la intervención, aunque las técnicas usadas están muy protocolizadas. Este riesgo muy bajo entre un 1% y 25%. Se pueden hacer dos distinciones:
Durante la cirugía ortognática
La complicación común es la lesión vascular, seguida de las lesiones nerviosas. Estas estructuras se ven muy expuestos durante la intervención. El más afectado suele ser el nervio Alveolar Inferior. También se puede producir daño del nervio Lingual, y de forma casi excepcional, lesión del nervio Facial durante la osteotomía mandibular.
Después de la cirugía ortognática
A nivel postoperatorio las complicaciones más comunes son las siguientes:
- Atrofia muscular: Aparecen secuelas como la atrofia y denervación, disminución de la masa, longitud, fuerza y extensibilidad muscular. Esto es producido por los periodos de inmovilización, así como la presencia de cicatrices postquirúrgicas, que generan una atrofia en la musculatura.
- Lesión nerviosa: es la lesión más habitual. El nervio más afectado es el Alveolar Inferior. Puede tener un tiempo de recuperación de 2 a 4 meses o una lesión que puede causar dolor a largo plazo.
Un 3% de los pacientes la padecen de manera permanentemente sufriendo sensaciones sensoriales extrañas en mentón boca y labios, esto les provoca: la incapacidad para no detectar los restos de comida que se les quedan en los labios o el mentón, dificultad para besar o comer, molestia en las encías, un ligero babeo, mordidas por dentro de las mejillas y errores al pronunciar ciertas palabras.
- Problemas en la Articulación Temporo-Mandibular (ATM): es una complicación que tiene una incidencia del 13,64%. Algunos estudios han demostrado que los síntomas pueden empeorar. Debido a la excesiva manipulación de los fragmentos proximales se produce un hematoma provocando una limitación en la apertura de la boca. Además después de la cirugía se produce una disminución del rango articular de entre un 60% a un 70%.
Hospitales donde se realiza la Cirugía Ortognática

Artículos de interés
Importante: Esta información tiene únicamente un carácter informativo y en ningún caso médico. Es importante que consulte a su médico sobre su enfermedad específica y el tratamiento más adecuado.