¿Cómo es la recuperación del láser verde, tulio y holmium para tratar la próstata?

 

El tiempo de recuperación en el hospital tras las operaciones de próstata con láser, ya sea verde, tulio u holmium, no suele superar el día de estancia, pudiendo el paciente abandonar el hospital el mismo día de la operación.

Esto es posible gracias a que el uso de la fibra láser para reducir el tamaño de la próstata permite ir sellando el tejido no vaporizado reduciendo el sangrado intra- y postoperatorio al mínimo.

 

Es muy probable que el médico te recete un tratamiento antibiótico durante el tiempo de recuperación para evitar posibles infecciones. Las recomendaciones en lo que respecta a dieta son equivalentes a las de cualquier otra operación de próstata, una dieta equilibrada con mucha fibra y evitando el consumo de bebidas alcohólicas o gaseosas.

 

El tiempo de recuperación tras estas intervenciones se basa simplemente en dos o tres días sin realizar esfuerzos físicos excesivos que puedan provocar problemas en la cicatrización de la próstata. Pasada la primera semana de la recuperación, el paciente notará una inmensa mejoría en lo que respecta al calibre urinario y a la potencia del mismo, eliminando por completo los síntomas de la hiperplasia benigna de próstata.

 

recuperacion prostata tiempo

¿Cómo es la recuperación tras la operación de próstata con los sistemas RTU, Urolift y Rezum? 

 

Para la recuperación tras el sistema RTU, una vez que estés en casa, el tiempo de recuperación estimado tras la operación de próstata con resección transuretral es de entre 3 y 6 semanas.

Durante este tiempo, es importante que el paciente descanse pero a su vez que realice movimientos ligeros como caminar para evitar perder forma física.

 

La alimentación durante el tiempo de recuperación tras esta operación de próstata debe ser normal y saludable, dándole especial importancia a la fibra para evitar estreñimiento, algo que puede retrasar la cicatrización de la próstata. Es muy importante beber mucha agua y evitar el alcohol o las bebidas con gas, ya que pueden llegar a irritar el aparato urinario.

 

La recuperación tras el sitema Urolift es la más rápida y menos invasiva de todas, de hecho el paciente puede abandonar la clínica a la hora de su realización para hacer vida normal. Sin embargo, es una operación que no contempla la reducción de la próstata sino la colocación de unos implantes que impiden que esta siga presionando la uretra.

 

Por lo tanto, la operación de próstata con sistema Urolift no soluciona el problema de la hiperplasia benigna de próstata sino que simplemente palia sus efectos adversos sobre la uretra y se usa solo en casos específicos que por problemas colaterales desaconsejan la intervención quirúrgica. En este caso, el paciente no tiene que observar reposo alguno y puede seguir con sus relaciones sexuales normalmente. Respecto a su micción, alcanzara su óptimo funcionamiento a partir de las dos semanas, aunque la mejoría será inmediata.

 

El sistema Rezum, conlleva una recuperación muy rápida y sin apenas molestias, ya que es una intervención que se realiza de manera ambulatoria. No es necesaria la hospitalización. El sistema Rezum a base de vapor de agua, permite preservar la función sexual masculina, incluida la eyaculatoria. Además el sistema Rezum no tiene ningún riesgo grave asociado. Solamente el 4 % de los pacientes, necesitan una reintervención. 

 

Los efectos secundarios que se pueden observar son locales y de poca intensidad como molestias y urgencia para orinar, algo de sangre en la orina o en el semen que desaparecen en pocos días.

 

 

¿Qué es lo que notarás al someterte a cualquier tipo de intervención de próstata?

 

Es posible que te coloquen un catéter urinario debido a que la hinchazón bloquea el paso de la orina. Si no puedes orinar una vez que te quitan la sonda, el médico te puede volver a colocar la sonda para permitir la cicatrización o podría darte una sonda para que te la coloques tú mismo varias veces al día hasta que la inflamación desaparezca y puedas orinar sin problemas.

 

 

También podrías notar lo siguiente:

 

 

  • Sangre en la orina. Es normal que veas sangre durante unos días o semanas después del procedimiento. Sin embargo, si la sangre en la orina es espesa, similar al kétchup, si el sangrado parece empeorar o si los coágulos de sangre bloquean el paso de la orina, llama al médico.
 
  • Síntomas urinarios irritantes. Tal vez sientas ganas de orinar con urgencia o con mucha frecuencia, o tal vez tengas que levantarte a orinar más seguido durante la noche. La mayoría de los hombres presentan ardor, especialmente, en la punta del pene y poco antes de terminar de orinar. Con determinados tipos de cirugía con láser, estos síntomas pueden durar varias semanas o incluso meses, según el proceso de cicatrización y el tamaño de la próstata.
 
  • Dificultad para contener la orina. Puede ocurrir incontinencia ya que la vejiga está acostumbrada a tener que expulsar la orina a través de una uretra estrechada por el agrandamiento del tejido prostático. En la mayoría de los hombres, este problema mejora con el tiempo.

¿Qué es lo que te recomienda el médico?

 

  • Tómalo con calma. Evita realizar actividades extenuantes, como levantar cargas pesadas, sin autorización del médico. Quizá debas esperar hasta dos semanas después de someterte al láser holmium o tan solo unos pocos días después de procedimientos como la vaporización fotoselectiva de la próstata.
 
  • No tengas relaciones sexuales. Es posible que el médico te recomiende que esperes hasta una o dos semanas después del procedimiento. Eyacular demasiado pronto puede causar dolor y sangrado.
 
  • Toma los medicamentos según la indicación médica. Si el médico te receta antibióticos, completa todo el tratamiento.

¿Por qué se realizan este tipo de intervenciones para tratar la próstata? 

La cirugía láser de próstata y los distintos sistemas ayudan a reducir los síntomas urinarios causados por la hiperplasia prostática benigna, entre los que se incluyen los siguientes:

  • Necesidad frecuente y urgente de orinar
 
  • Dificultad para comenzar a orinar
 
  • Orina lenta (prolongada)
 
  • Orinar con más frecuencia durante la noche
 
  • Detenerse y comenzar a orinar nuevamente
 
  • Sensación de no poder vaciar la vejiga por completo
 
  • Infecciones de las vías urinarias
 

La cirugía también puede realizarse para tratar o para prevenir complicaciones debido al flujo bloqueado de orina, como las siguientes:

  • Infecciones urinarias recurrentes
 
  • Lesión en riñones o vejiga
 
  • Incapacidad para controlar las micciones o incapacidad total para orinar
 
  • Cálculos en la vejiga
 
  • Sangre en la orina

Artículos de interés

Importante: Esta información tiene únicamente un carácter informativo y en ningún caso médico. Es importante que consulte a su médico sobre su enfermedad específica y el tratamiento más adecuado.